lunes, 28 de mayo de 2018
#Corazones
Platón en su obra "El banquete" citando a Aristófanes nos habla del ser humano original: "los hombres tenían formas redondas, la espalda y los costados colocados en círculo, cuatro brazos, cuatro piernas, unidas a un cuello circular y perfectamente semejantes, una sola cabeza, que reunía estos dos rostros opuestos entre sí, dos orejas, dos órganos sexuales, y el cuerpo bien proporcionado". Eran de tres clases: uno, compuesto de hombre y hombre; otro, de mujer y mujer; y un tercero, de hombre y mujer, llamado andrógino. Cuenta Aristófanes :"los cuerpos eran robustos y vigorosos y de corazón animoso, y por esto concibieron la atrevida idea de escalar los cielos y combatir a los dioses". Zeus, enterado de los planes de los hombres exclamó :"Que los parta un rayo" y pasó a la acción. Medios aturdidos por el impacto la humanidad se dio cuenta que había sido dividida exactamente por la mitad. Reinó tal confusión que el plan original quedo descartado. Llevó un tiempo adaptarse a la nueva realidad y aún hoy siempre tenemos la sensación que algo nos falta. De ahí que andemos por el mundo buscando donde está la mitad de nuestro corazón y de nuestra alma. La división ocurrió en el centro de nuestro cuerpo. Lo que llamamos ombligo, lo que los budistas llaman nuestro centro de poder. Nuestra atención está allí y en nuestra cabeza. Por eso nos creemos el centro, el ombligo del mundo. El único órgano que no se detiene nunca es nuestro corazón. Es tan importante escucharlo!. Cuando los planetas se alinean y reconocemos la mitad de nuestro corazón latiendo en el pecho de la amada la búsqueda ha cesado. La ciencia descubrió que dos corazones sincronizan perfectamente los latidos cuando dos personas especiales se encuentran. Cuando eso nos ocurre, que más podemos pedir al universo? @SpoturnoV
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