jueves, 7 de junio de 2018

Oro del Rhin, el anillo del Nibelungo

Albérico, rey de los nibelungos, hijos de la tierra, enanos y orfebres que vivían en grutas y las profundidades, caminaba por la orilla del río. De pronto vio a tres hermosas hijas del Rhin, ninfas del agua. Estas bellas, risueñas y juguetonas Ondinas eran las custodias del oro del río. Se detuvo a admirarlas y entablar una conversación amena, donde las ondinas aprovecharon la oportunidad de burlarse de él y provocarlo con seductores y rítmicos movimientos. El gnomo de la noche no podía atraparlas a pesar de sus esfuerzos. De pronto, el brillo del sol reflejó el oro en una piedra, Albérico, a pesar de sus años, el dolor crónico en su espalda y sus gruesas gafas, la visión de aquello y la ambición ancestral de su raza por aquel metal lo hizo deslizar como una gacela entre las rocas y burlando la vigilancia de las doncellas pronto estuvo listo para desprender un pedazo de aquella piedra brillante y huir. Wellgunde, la más parlanchina de las ondinas se lamentaba de haberle revelado a aquel enano el secreto del oro del Rhin, "quien forjase un anillo de aquel oro tendría poderes inimaginables". Las ondinas estaban allí por orden del dios Odín. También llamado Wotan era el señor de la sabiduría, la muerte y de la guerra. Era también el dios de la poesía,de la magia y las runas, quien había encargado a dos gigantes Fasolt y Fafner la construcción del castillo y sus murallas en la tierra de Asgar. Uno de los nueve mundos unidos por las raíces del "fresno perenne" o árbol de la vida, donde se ubica el Valhalla, el paraíso de los nórdicos y germanos. Para pagarle a los gigantes había ofrecido a su cuñada Freia, la diosa de la primavera. En momentos que Odín y los gigantes estaban reunidos al haber terminado la obra y venían a cobrar la recompensa llega la noticia del robo del Oro del Rhin y pactan cambiar a Freia por el anillo de Albérico y sus superpoderes. Odín respiró aliviado por las tensiones que su pacto había generado con Fricka, su esposa. Había enviado a su asistente Loki a una búsqueda por todo el mundo a buscar otra diosa de la primavera sin éxito. El robo del oro no era tan mala noticia porque le permitía ganar tiempo mientras atrapaban al rey de los enanos. Aunque los gigantes llevaron a Freia como rehén hasta que se hicieran con el anillo. Las heladas regiones se verían más cálidas y templadas con la llegada de la diosa primavera. Thor,dios del trueno, Valí, dios de la luz y Balder, el sabio, hijos de Odín pronto sintieron los efectos. Al irse Freia, las manzanas doradas que era el alimento de los dioses y fuente de su poder dejaron de crecer, lo que hacía la búsqueda más que presurosa. En el país de Níbelung, no sólo habían forjado rapidamente el anillo sino un yelmo con dones de invisibilidad para su rey. Con este poder tenía a sus súbditos tiranizados, los hacía trabajar día y noche en las cuevas para extraer más y más oro, azotando a diestra y siniestra, tanto por saña como por avaricia. Mime, el enano artesano del yelmo y el anillo estaba encadenado próximo a la entrada del reino. Odín en su descenso al submundo lo encuentra y lo libera. Escucha atentamente las desdichas de los nibelungos y los secretos de Albérico. Una vez conducido por Mime al centro de una gran cueva el rey de los enanos sale a recibirlo. Seguro de sus poderes se vanagloria ante Odín. "Este yelmo me mantiene a salvo, además de la invisibilidad me permite transformarme en cualquier animal que desee", en serio?, contesta Odín y pregunta, en serpiente?. Dicho esto el enano se transforma en una. Viste? dice soy invencible. Si responde el dios,y en un sapo muy pequeño? aunque eso sería muy dificil, guiñando un ojo a su Loki, su lugarteniente para que esté alerta. No hay nada difícil para mi, tengo superpoderes. Alberico cae en la trampa, se transforma en sapo y es apresado. Una vez en la superficie, en el palacio real es despojado de su anillo y su yelmo. Como rescate piden todo el oro acumulado en las cuevas. Los nibelungos traen todo el oro atesorado. Se sienten liberados de aquello que tanto dolor les causó. Una vez libre el rey gnomo lanza una maldición: "el anillo era más importante que mi vida, condeno a quien lo tenga a ser poseído por su embrujo, atraerá toda desgracia sobre él". Fasolt y Fafner, los gigantes enterados de los hechos se presentan ante Odín y le dicen: "liberaremos a Freia a cambio de su alto y ancho en oro". Acuerdan y comienzan a apilar el oro en torno a la diosa. Casi estaba completa la pila cuando notan que aún se veían sus cabellos. Para compensar exigen el yelmo a Odín, pero aún se veía un pequeño orificio justo en el ojo. "Dadme el anillo" dice Fasolt, Odin se niega, la magia del anillo ya estaba haciendo sus efectos. Entra en escena Erga madre de su esposa Fricka y de Freia; dirigiéndose y mirando a los ojos a Odín: "Escúchame, todo lo que existe morirá, un día oscuro se cierne sobre los dioses, despréndete del anillo". Odín lanzando el anillo a los gigantes exclama: "ven a mi Freia, la juventud nos ha sido devuelta". Los gigantes se pierden en una lucha desenfrenada por el anillo. Todos comprenden su terrible poder. Odín con su familia emprenden camino, atraviesan el puente del arcoiris y llegan al Walhalla. Los gigantes, heridos de muerte mutuamente caen al Rhin, junto con el oro y el anillo. Woglinde, Wellgunde y Flosshilde las tres Ondinas del Rhin estallan en cánticos de felicidad: "Oro del Rhin, oro del Rhin, oro del Rhin". Este breve relato está basado en la maravillosa y emblemática obra musical de Richard Wagner (1813-1883)  "El anillo del Nibelungo". Es la más paradigmática del espíritu germánico y la obra unitaria más extensa de la ópera, ya que está compuesta de "el oro del Rhin" "La Walquiria" "Sigfriedo" y "El ocaso de los dioses". @SpoturnoV

No hay comentarios:

Publicar un comentario